Como acto final el papa ofreció una misa en la Base Aérea Las Palmas (Lima), que según cálculos del Arzobispado de Lima congregó a un millón y medio de personas. En Trujillo realizó una misa en el balneario de Huanchaco y recorrió las calles del barrio de Buenos Aires afectados por el Niño Costero. En Puerto Maldonado tuvo un encuentro con los representantes de los pueblos amazónicos y en sus discursos abordó temas como la minería ilegal, la trata de personas y la violencia contra las mujeres.